La Escuela de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Camargo, como entidad coordinadora de la Red de Escuelas Asociadas de la UNESCO en Cantabria, organizó durante los meses de mayo y junio una serie de talleres de cocina para estudiantes de la región en los que se dieron a conocer los beneficios de la Dieta Atlántica y se explicaron cómo preparar algunos platos tradicionales.

En estas clases prácticas que estuvieron dirigidas por el cocinero Jesús Fernández participaron un total de 109 alumnos que aprendieron y practicaron los conceptos fundamentales de la cocina con Dieta Atlántica.

Ésta se define por la sencillez en la preparación de los platos para mantener la calidad de las materias primas y su valor nutritivo, por tratar de mantener los hábitos alimentarios tradicionales atlánticos, y por la recomendación de realizar ejercicio físico a diario adecuado a cada persona.

Las Escuelas Asociadas participantes en estos talleres fueron el CEIP Juan de Herrera de Maliaño y el Colegio Altamira de Revilla de Camargo; el Colegio La Anunciación y Centro de Estudios Castroverde de Santander; y el Colegio Nuestra Señora de La Paz de Torrelavega,  y en ellos los estudiantes pudieron conocer en profundidad el estilo de alimentación que comparten las zonas bañadas por el océano Atlántico hacia el norte europeo en países como Portugal, España, Francia e Inglaterra, principalmente. En España, las comunidades con esta característica comprenden Galicia, Principado de Asturias, Cantabria y País Vasco.

En los talleres de cocina organizados desde la Escuela de Medio Ambiente de Camargo los alumnos pudieron colaborar en la confección de un menú basado en esta Dieta Atlántica, formado por Tortos de maíz con solomillo de cerdo y manzana caramelizada, y por Tarta de hojaldre y manzana al estilo tradicional.

Además, en cada centro participante se realizó un trabajo previo en el que el alumnado investigó los fundamentos de esta dieta y sus diferencias con la Dieta Mediterránea, elaboró una selección de recetas identificativas, y realizó trabajos de divulgación para dar a conocer en cada centro participante las características de esta dieta.

Características de la dieta

Esta iniciativa en torno a la Dieta Atlántica fue el tema elegido por la Red de Escuelas Asociadas de la UNESCO en Cantabria como proyecto conjunto para el curso 2017-2018, entre las temáticas que se propusieron en el XXX Encuentro de Trabajo de la Red a nivel nacional que se celebró en julio de 2017 en Teruel.

La labor en torno a esta dieta se inició en España en 2007 cuando se creó la Fundación Dieta Atlántica promovida por la Universidad de Santiago de Compostela, con el objetivo de estudiar y promover las particularidades de esta alimentación, que favorece un consumo sostenible al utilizar productos de temporada.

Las principales características de la dieta atlántica pasan por un consumo de tres a cuatro veces por semana de pescados tanto de mar como de río o mariscos, un elevado consumo de alimentos de origen vegetal como cereales, patatas y legumbres; o el consumo alto de frutas como manzanas y cítricos u hortalizas como la berza, los grelos, las nabizas, las judías, pimientos, cebollas, zanahorias, guisantes y ajos.

Otra de las características es el uso del aceite de oliva como principal grasa culinaria; la ingesta diaria de productos lácteos tanto en forma de leche como en derivados fermentados con beneficios adicionales; el consumo moderado de carnes preferentemente magras y que formen parte de platos a base de verduras, legumbres o patatas; y la ingesta abundante de líquidos, sobre todo de agua como bebida de excelencia para mantener nuestro cuerpo a buen ritmo.

En comparación con la Mediterránea, la Dieta Atlántica proporciona más proteínas y menos hidratos. Las dos proponen el consumo de pan y patatas pero la Atlántica aconseja que el pan sea integral y la patata cocida. También aconseja el consumo de más lácteos que la Mediterránea y tiene mucho más contenido en Omega 3 por la presencia de pescados y mariscos  entre tres a cuatro veces por semana.