El Ayuntamiento de Camargo, a través de la Concejalía de Servicios Públicos que dirige Jesús Torre, ha ampliado el servicio de limpieza viaria con dos nuevas máquinas barredoras y dos trabajadores, con el fin de mejorar el funcionamiento y la calidad de una prestación esencial y especialmente sensible para el ciudadano que con frecuencia es motivo de quejas por parte de los vecinos.  

            El alcalde, Angel Duque, afirmó que el esfuerzo económico que el Ayuntamiento hace para reforzar este servicio con nuevos medios materiales y humanos se tiene que traducir en una mejora importante de la limpieza viaria, ya que el número de barredoras se duplica y la plantilla aumenta de 19 a 21 trabajadores.

 

            La ampliación del servicio de limpieza viaria, con un coste de 173.000 euros anuales, fue aprobada por el Pleno de la Corporación el pasado 30 de septiembre. “Creemos que estos nuevos medios van a responder a las necesidades que tiene un Ayuntamiento como Camargo; los vecinos tienen que notar una diferencia clara y una mejora sensible en términos generales”, afirmó.

 

            Al mismo tiempo, el alcalde hizo un llamamiento a los ciudadanos para que ayuden al Ayuntamiento a mantener limpias las calles, los parques y los jardines del municipio. Agregó en este sentido que la colaboración ciudadana es el mejor complemento posible al esfuerzo que el Ayuntamiento realiza, con el dinero de los vecinos, para reforzar el servicio de limpieza viaria.   

 

            Acompañado por el gerente de Sintrasa, empresa adjudicataria del servicio de limpieza viaria, el alcalde saludó a los dos nuevos operarios y conoció de primera mano el funcionamiento y las características de las dos nuevas máquinas que se presentaron en la Plaza del Ayuntamiento.

 

            Las nuevas barredoras están dotadas con los últimos adelantos del mercado, y tienen mayor capacidad de absorción al incorporar un depósito con capacidad para 450 litros de agua. También incorporan un tercer cepillo que mejora la calidad del barrido y permite cubrir todo el ancho de la acera, así como un sistema de aspiración para la limpieza de imbornales, alcorques, etc.

 

            Las dos nuevas máquinas se repartirán el casco urbano, mientras que la barredora grande seguirá cubriendo el servicio en los pueblos y los polígonos, y la cuarta máquina, la más pequeña, se centrará en la limpieza de parques y plazas.