Un complejo de tiro con arco puntero para acoger competiciones de carácter internacional; un rocódromo al aire libre de los mayores de España, espacios abiertos para competiciones deportivas, conciertos de música o actuaciones teatrales; circuito de tirolinas, simulador de caída libre y dotaciones para deportes alternativos y de aventura como skateboard o bungy jumping; piscina cubierta acristalada, gimnasio, pistas de tenis y paddle, zona de juegos infantiles, restaurante y cafetería, zona de picnic o un circuito ciclopedrestre. 

Son algunas de las dotaciones previstas en el anteproyecto encargado por la Junta Vecinal de Igollo para la restauración ambiental y dotación de instalaciones deportivo-culturales en la Cantera de Mazaloma, un espacio de más de 40.000 metros cuadrados que se ha visto sometido a un fuerte proceso de deterioro y que con este “sueño” podría convertirse en un foco de atracción e interés regional y nacional.  

El anteproyecto se ha presentado en el Salón de Plenos del Ayuntamiento, en un acto en el que el presidente de la Junta Vecinal de Igollo, Roberto Terán, pidió al alcalde, Angel Duque, que ejerza como “embajador” ante las autoridades regionales para presentar al Gobierno este proyecto “en el que pueden conjugarse los intereses no sólo de Igollo y de Camargo, sino de Santander y de toda Cantabria”, y en cuyo desarrollo también se buscará la implicación de la iniciativa privada. 

El pedáneo pidió al Ayuntamiento que contemple en el nuevo Plan General de Ordenación Urbana esta propuesta que combina dotaciones convencionales con otras muy novedosas, y que, según explicó, se encuentra “en una primera fase que por el momento no pasa de ser una declaración de intenciones”. “El pueblo de Igollo ha visto desaparecer tres montes y ha pagado un peaje de contaminación, polvo, ruido y tránsito bastante elevado”, subrayó Terán. 

“UN SUEÑO” 

El alcalde no ocultó que este proyecto es “un sueño que va a costar llevar adelante” pero felicitó a la Junta Vecinal por su “valentía” y asumió el compromiso de “acompañar al pueblo de Igollo en esta aventura hasta donde sea posible y buscar donde haya que buscar para conseguir los medios que permitan convertir este sueño en realidad gradualmente”. 

Duque apoyó la idea de convertir una cantera abandonada que en este momento no está sirviendo para nada en un lugar donde los ciudadanos de toda Cantabria puedan ir a practicar su deporte, a participar en actividades culturales o simplemente a darse una vuelta por un lugar que realmente va a tener “mucho tirón”. 

PROYECTO “NOVEDOSO Y PUNTERO” 

Los técnicos de Gea Impulso Global, autores del anteproyecto, presentaron los pormenores de esta propuesta “totalmente novedosa y puntera en el ámbito regional, nacional e internacional” que, al tener como principal objetivo la recuperación ambiental de una zona degradada, es susceptible de ser financiada con fondos europeos.  Según explicaron, la idea es mantener la “espectacularidad” del entorno natural adaptándolo a las nuevas circunstancias para favorecer un uso recreativo “en la mayor extensión de la palabra”, a través de la dotación de instalaciones deportivas, culturales, de ocio y turísticas.

El espacio se encuentra bien situado, con acceso directo a la Ronda de la Bahía, pero “lo suficientemente retranqueado para crear reservorios de ocio, medio ambiente y cultura”. La propuesta cuenta con el apoyo de los propietarios colindantes y de la Federación Cántabra de Tiro con Arco, cuyos representantes asistieron a la presentación en el Salón de Plenos.

Según consta en el anteproyecto, la zona estará dotada de aparcamientos con capacidad para 200 vehículos, un edificio de oficinas multifunción para zona de exposiciones y recepción de visitantes, edificio polideportivo, complejo de tiro con arco cubierto y cerrado, así como un complejo de escalada, montaña y espeleología en varias modalidades (paredes de escalada en roca, en bulder, simulación de escalada en hielo,…) y con posibilidades de ampliación. 

También contará con un “parque aventura” dotado con circuito de tirolinas, simulador de caída libre, puenting, zona de observación astronómica, etc, además de un edificio de tres plantas ideado en un principio para las Federaciones de Montaña, Escalada y Espeleología, y espacios para la realización de conciertos y actividades culturales con gran aforo.  Todas las intervenciones y actividades están encaminadas a ser compatibles con el medio natural y a mejorar el mismo. Se contempla igualmente la recuperación del mayor número posible de estructuras de arqueología industrial, así como la conservación y puesta en valor de los yacimientos arqueológicos del sector, especialmente la ‘Cueva de Ruso’.